RedUNE denuncia a Margarita Galaz ,tras nuevos testimonios de su proceder coercitivo a familiares de enfermos oncológicos.
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Junto con saludar escribo como un acto desesperado y llena de impotencia para pedir orientación y ver la posibilidad de hacer justicia por la muerte de mi hermana, ocurrida el pasado 25 de noviembre en Santiago de Chile, rrss seguir los consejos de la Germánica Pura.
No quiero que otras mujeres que luchan contra el cáncer sufran el mismo destino, víctimas de terapias alternativas engañosas con tintes de secta que prometen la curación a través de la gestión del dolor y la resolución de conflictos biológicos o psique.
Estas prácticas, lamentablemente, gozan de una creciente popularidad y, debido a la falta de legislación, no enfrentan ningún tipo de sanción.
Cada día voy conociendo más casos de muerte por estas terapias, pero las familias no se atreven a denunciar.
Mi hermana falleció de cáncer de mama tras seguir ciegamente los consejos de Margarita Galaz, divulgadora de la Medicina Germánica Pura (NMG). Galaz, ingeniera agrónoma de profesión, donde conoció a mi hermana y desde hace 12 años se dedica a difundir las teorías de Hamer y sus 5 leyes biológicas.
Es chilena, reside en España junto a su pareja, y ofrece "acompañamiento" a través de plataformas virtuales como Zoom y Telegram.
Incluso tenían un grupo llamado SBS de mamas al que pertenecía mi hermana.
Según Galaz, el conflicto biológico de mi hermana era producto de su sobrina regalona y que le “sugirió” apartarla de su vida hasta terminar el proceso.
La verdad es que nadie, y mucho menos una persona sin formación médica adecuada, tiene la autoridad para determinar el origen de una enfermedad sin los estudios, la anamnesis y el conocimiento profundo de la historia de vida y los conflictos que pudo haber enfrentado una persona. Es irresponsable y peligroso atribuir el origen del cáncer de mama de una persona a un conflicto emocional específico, como lo hizo Margarita Galaz.
Durante su enfermedad, mi hermana fue obligada a soportar “estoicamente” sus dolencias y hemorragias, ya que cualquier medicamento o tratamiento médico convencional era considerado una interferencia en el "proceso de sanación" y podía poner en peligro su vida. Esta prohibición la sumió en un estado de sufrimiento innecesario, similar a retroceder al siglo XVII.
Además, se le impuso un aislamiento social, alejándola de cualquier persona que no compartiera su enfoque "terapéutico". Estas personas, incluyendo familiares y amigos, fueron catalogadas como "depredadores".
Este aislamiento emocional y físico la condujo a un deterioro extremo, sufriendo de caquexia y anemia aguda debido a las hemorragias prolongadas que no recibieron atención médica.
La manipulación mental ejercida sobre mi hermana fue tan intensa que la convirtió en un eco de las ideas de Galaz, repitiendo sus argumentos y viéndose a sí misma como un fantasma dentro de su propio cuerpo.
Considero que Galaz presenta rasgos de psicópata integrado o narcisista, lo que le permitió ejercer un control casi total sobre mi hermana.
La situación llegó a tal punto que no pudimos despedirnos de ella, porque ya no estaba conectada con el mundo.
Mi familia está destrozada: mi tía, quien la cuidó en la primera etapa de su enfermedad, sufrió un doble infarto por lo sucedido, mi padre se encuentra sumido en un estado de shock y dolor constante (también se le “sugirió” a mi hermana alejarse de ellos). La fractura a nivel familiar es profunda y difícil de reparar. Fue una historia de terror.
Para colmo, Galaz nos culpó a nosotras por la muerte de mi hermana, acusándonos de ser "asesinas" y "responsables" de su trágico final, sin ningún argumento. Nos bloqueó de sus rrss, wsp, correos y usa a su séquito para insultarnos o amenazarnos cada cierto tiempo cuando subimos o comentamos algo de ella en redes.